Director: John Ford
Intérpretes: James Stewart, Richard Widmark, Shirley Jones, Linda Cristal, Andy Devine, John McIntire, Mae Marsh, Anna Lee, Harry Carey Jr., Woody Strode
Sinopsis: Los familiares de los prisioneros blancos secuestrados por los comanches presionan al ejército federal para que los rescate. Al cínico comisario de Tascosa, Guthrie McCabe (James Stewart), lo convence el comandante Frazer para que se encargue de negociar con los indios la entrega de los cautivos. Le acompañará en su misión el teniente Gary (Richard Widmark).
Este sábado 16 de agosto a las 15:30 h. en Paramount.
Bastante incomprendida en su momento tanto por crítica como por público, TWO RODE TOGETHER (DOS CABALGAN JUNTOS) se erige hoy en día como una esplendorosa, magistral obra de madurez del sin par John Ford.
Son varios los que han apuntado con evidente acierto que supone una variante temática y formal de su divina CENTAUROS DEL DESIERTO. No solo eso, dentro de sí misma alberga unos radicales cambios de tono que la enriquecen aún más y le confieren una dimensión especial.
Desde luego, ya les garantizo que su perspectiva acerca del rapto de blancas por parte de los indios, está contemplada desde un prisma un tanto insólito y muy personal.
Ford adereza a su principal hilo conductor, Guthrie McCabe, de un particular sentido del humor, sirviéndose para ello de un –como siempre- sensacional James Stewart, quien también él viene a constituir una variación, en este caso del célebre Wyatt Earp y pistoleros similares. El retrato ofrecido no es precisamente glorificador ni edificante, pero gracias al arte del birli birloque que poseía la impresionante visión con que contemplaba a través su único ojo a sus criaturas, acaba dando el pego y pareciendo este individuo de lo más simpático y encantador. Y esconde grumos, bastante grumos tras ese amable antifaz y agradable superficie.
Dándole admirable réplica se encuentra ese actor que era también un seguro en sí mismo, que jamás fallaba, el rubiales Richard Widmark. Ambos protagonizan una memorable secuencia –y se van a encontrar con muchas de este calado- resuelta con plano fijo frontal en la orilla de un río. Y no les diré más, pero les aseguro que no tiene desperdicio la parrafada que se larga el uno al otro. Dos maneras contrapuestas de ver y entenderla vida.
Las chicas son, igualmente, de lo más atractivas y consistentes, Perla Cristal (todo un bellezón, el objeto de atenciones de Wayne/Crockett en EL ÁLAMO) y la en ese momento emergente Shirley Jones, la que había encandilado al padre viudo (Glenn Ford) de Eddie en la película de Vincente Minnelli de título nada “ejemplicifador”, la adorable EL NOVIAZGO DEL PADRE DE EDDIE.
Es una apasionante obra de esplendoroso ocaso del maestro. Verdaderamente compleja, lúcida, cínica, siempre humana. Otra lección de cine. Pocas más le restarían por motivos de salud, claro que todas ellas volverían a ser de categoría superior: EL HOMBRE QUE MATÓ A LIBERTY VALANCE, LA TABERNA DEL IRLANDÉS, SIETE MUJERES y dos porciones más (LA CONQUISTA DEL OESTE y EL SOÑADOR REBELDE).
José Luis Vázquez