martes, 6 de mayo

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Estreno en Royal City

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Un Dios prohibido ()

Director: Pablo Moreno

Intérpretes: Iñigo Etayo, Jerónimo Salas, Alex Larumbe, Luis Segui, Eneko Capapay, Gabriel González, Ricardo del Cano, Isaac Israel, Guido Agustín Balzaretti, Javier Suárez, Julio Alonso, Juan Lombardero, José María Rueda, César Diéguez, Daniel Gómez, Jorge Ferrer, Rodrigo Saiz, Teseo Martín, Santiago Blanco, Gabriel Latorre, Jesús Guzmán, José Carlos Cañas, Mauro Muñiz, Elena Furiase, Ainhoa Aldanondo, Raúl Escudero, Jacobo Muñoz, Juan Alberto López, Alex Tormo, José García Carrasco, Miguel Ángel Morenza, Juanjo Díaz Polo, Chema Coloma, Jordi Estupiña, Gonzalo Mérida, Juan Rueda, Emma Caballero, María Jesús Pereiro, Rodrigo Poison

Sinopsis: Verano de 1936, inicios de la Guerra Civil española. La película narra el martirio de 51 miembros de la Comunidad Claretiana de Barbastro (Huesca), deteniéndose en el aspecto humano y religioso de las personas que participaron en este hecho histórico y resaltando la dimensión universal del triunfo del amor sobre la muerte.

Crítica de José Luis Vázquez

Valoración: 1 estrellas

Esta producción española bien podría disputarle a MOVIE 43, ser hasta el momento, la peor estrenada este año en las pantallas españolas.

Izquierdas o derechas, lo mismo da que da lo mismo para el caso, miren que hemos hecho varias películas feas sobre nuestra Guerra Civil, sobre la represión y la barbarie allí mostrada por uno u otro bando. Y quede claro, que no es una cuestión de que se hagan más o menos, pues repasar nuestra historia resulta de lo más respetable desde el punto de vista que sea, pero tan solo pido una cosa, que las hagan bien, de calidad. Además, tengo la sensación de que en esta piel de toro cada vez que abordamos el asunto religioso, desde el prisma que sea, me da que nos sale en exceso esa visceralidad latino/mediterránea. Ahí tienen como pésimo ejemplo en las antípodas de este ejemplo, el Pedro Almodóvar de LA MALA EDUCACIÓN.

Encima hace falta bemoles que tuvieran que llegar una más los anglosajones para, con la excusa de hablar sobre Escrivá de Balaguer, para hacer la mejor propuesta sobre nuestro fratricida conflicto guerracivilista: ENCONTRARÁS DRAGONES. Adoptando además, una visión inteligente, distante y conciliadora.

Dirigida por Pablo Moreno tiene un tufillo amateur que tira de espaldas. Pobre de producción, pobre de planificación, de montaje, de vestuario (de un reluciente que le resta todo asomo de credibilidad), con una horrorosa fotografía diluida por momentos, un pésimo sonido, un croma chirriante y unas interpretaciones de un acartonamiento que desencaja. Si acaso los dos actores que se presentaban con más proyección o pedigrí salvan los muebles, la hija de Lola Flores, la joven Elena Furiase como la miliciana Trini y el muy veterano Jesús Guzmán, el inolvidable cartero de CRÓNICAS DE UN PUEBLO, como un anciano y enfermo sacerdote.

Si LAS 13 ROSAS, desde la vertiente republicana, me resultó maniquea y apolillada, ésta ya ni les cuento. Y les aseguro que en este momento de vida, no es cuestión de que tire para ningún bando en concreto. En cualquier caso tiraría hacia aquél que denuncia la atrocidad y el salvajismo procedan de donde procedan. Mi reproche único, principal, es debido a una cuestión formal, a hacer cine o el que a mí me gusta, claro. Encima dura dos interminables horas y cuarto.

Y por supuesto que tanto esta historia, como la citada de LAS 13 ROSAS, la de LA VOZ DORMIDA o tantas otras, contienen en principio una gran fuerza y valor dramáticos, pero en esta nuestra querida España que cantaba Cecilia, nos sale en exceso la víscera latina y muy poco la emotiva contención y tremenda profesionalidad anglosajona. Si hasta la mejor película sobre una de nuestras figuras más de la historia, Rodrigo Díaz de Vivar “El Cid”, tuvo que venir a hacérnosla un estadounidense, el genial Anthony Mann.  

Son tan maniqueos sus personajes, tan impolutos tan perversos y demoníacos los otros. Exactamente igual que en tantas ocasiones, se haga desde la trinchera que sea. Menos mal que Berlanga fue capaz de ofrecernos algo de su acracia y amplio punto de vista en la no lograda pero valiosa LA VAQUILLA. Y qué pena que aquí no seamos capaces de hacer como en Hollywood, que la sureña LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ, ensalzadora de su forma de vida, fue gestada por los del bando contrario, los del Norte. Confío que algún día. Mientras nos toca padecer las cosas terribles siempre del contrario y jamás las positivas. La filosofía humanista y comprensiva de la Harper Lee de MATAR UN RUISEÑOR todavía no tiene su sitio por estos lares.  

Y no, no es manía, de verdad, si no les puede el sectarismo o el partidismo de un bando u otro, intenten analizarla cinematográficamente y ya se dirán a sí mismos.  

La historia, es uno de tantos episodios terribles, como hubo en la otra parte, vividos en nuestra relativamente lejana contienda, al comienzo de la misma, la ejecución de 51 religiosos claretianos en Barbastro por parte de fuerzas republicanas seguidoras del ideario proclamado por Moscú.  

Lástima de ocasión perdida. Poco más tengo que añadir.  

José Luis Vázquez