Director: Thomas Szabo
Intérpretes: Animación
Sinopsis: Adaptación cinematográfica de la serie televisiva de animación "Minuscule". En el tranquilo claro de un bosque, los restos de un picnic abandonados encienden la guerra entre dos tribus de hormigas. En juego está una caja de azúcar. Una intrépida mariquita se ve atrapada en medio de la batalla. Un viaje épico a ras del suelo.
Sin diálogos pero con diversos y permanentes ruidos o sonidos de diversa índole, esta MINÚSCULOS: EL VALLE DE LAS HORMIGAS PERDIDAS, nada tiene que ver con la magistral BICHOS de Pixar o la deliciosa HORMIGAZ de DreamWorks, pero denota sello y estilo propios.
Es animación europea, francesa para más señas, obtuvo el César al mejor largometraje en ese apartado, que tira de inventiva, elaboración y raro encanto. Está concebida con criaturas digitales y fondo real.
De esos trabajos que pueden concitar por igual la atención de niños y adultos. Los primeros disfrutarán de una didáctica e imaginativa clase sobre el mundo de los insectos. Los segundos pueden valorar el mimo y la delicadeza con que han sido engarzadas sorprendentes imágenes e historia “muda”.
También en esto, nuestros vecinos galos vuelven a dar muestras de versatilidad, capacidad y singularidad, ofreciendo algo distinto y muy profesional.
La protagonista de la historia es una mariquita que sirve de hilo conductor para introducirnos en un abigarrado y bullente microcosmos, que acaba resultando de lo más esclarecedor sobre la vida sobre, bajo o a ras de tierra de algunos de los seres más minúsculos que pueblan el planeta, obviando a bacterias o microbios claro.
Constituye la traslación a la gran pantalla de una serie para televisión de 2006 compuesta por episodios de 5 minutos y cuyos creadores son los mismos que han dado aquí el salto, Thomas Szabo y Hélène Giraud, manteniendo prácticamente idénticas señas de identidad aunque en formato y duración más alargadas.
De lo más curiosa y gratificante.
José Luis Vázquez