jueves, 25 de abril

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Opinión

La incoherencia del PP no va solo de macrogranjas

Por Mayte Fernández. Senadora del PSOE.

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Resulta complicado hacer un seguimiento de las posiciones políticas del Partido Popular y entender cuál es su alternativa a la hora de formular propuestas que configuren un proyecto político sólido, que nos haga entender cuál es la idea de futuro que nos ofrecen para construir la sociedad del siglo XXI.

Siempre he pensado que la tarea de la oposición, entre otras cosas,  tiene mucho que ver con la confrontación de ideas y propuestas que mejoren la tarea de quien legítimamente tiene la labor de gobernar y por tanto, repercutan en la mejora continua de las condiciones de vida de la ciudadanía, de los sectores productivos y en general de la sociedad que espera de sus representantes cierta consistencia en el modelo que defienden.

El Partido Popular se encuentra inmerso en una cadena de incoherencias, en todos los aspectos, que finalmente afectan a la vida de las personas, y es que es ciertamente preocupante que la estrategia del ruido haya calado tan hondo en un partido tan importante, que finalmente está renunciando a  su papel en nuestro sistema democrático.

Prueba de esta tesis, es el bochornoso espectáculo que esta semana nos ha ofrecido el PP en España y especialmente en Castilla-La Mancha, cuando parecía importar poco el modelo de ganadería que queremos para nuestra tierra, su sostenibilidad y prestigio, cobrando mucho más peso en su discurso el ataque despiadado al adversario; y si para eso había que cambiar de posición, pues se cambia y ya está, se ejerce un borrado masivo de mensajes en las redes sociales y “si cuela, cuela”.

Afortunadamente, la hemeroteca es un instrumento muy útil y el mismísimo  líder del  PP en Castilla-La Mancha, el señor Núñez, que ayer defendía un modelo de ganadería más sostenible, hoy niega la mayor y perdiendo toda credibilidad, donde “dijo digo ahora dice Diego”, y eso sí,  del voto en contra del PP en las cortes generales a la Ley de Cadena Alimentaria: “ni mu”.

Definitivamente, la incoherencia del Partido Popular está tan incrustada en su discurso  que cuesta encontrar continuidad en sus propuestas, y es que cuando tienen la oportunidad de gobernar hacen todo lo contrario de lo que defienden en la oposición. Son muchos los ejemplos que podemos poner sobre la mesa pues, por mucho que se esfuercen, no pueden borrarse con la misma facilidad que se borra un tweet.  

En educación y en sanidad, por ejemplo, piden lo contrario a lo que hicieron. Y es que resulta paradójico que después de cerrar  escuelas rurales, eliminar los apoyos en educación infantil, aumentar las ratios en las aulas,  despedir más de 10.000 empleados públicos de nuestras escuelas, hospitales, centros de salud, servicios sociales, hoy se rasguen las vestiduras criticando la magnífica respuesta que el gobierno de Castilla-La Mancha ha articulado para sostener y potenciar los pilares de las políticas del bienestar social cuando más se necesitaban.

Podemos seguir hablando de incoherencia en materia fiscal, y es que el mismo  PP de Castilla-La Mancha que fue capaz de crear 320 tasas y que hoy  insiste en bajar impuestos, vota en contra de la ley que recoge la eliminación de tasas y propone nuevas deducciones fiscales con carácter progresivo y solidario, para familias y empresas de la región.

Pero la mayor incoherencia del Partido Popular de Castilla-La Mancha y de España es la negación permanente de los buenos datos económicos y de empleo que demuestran que la respuesta a la crisis sanitaria que desde los gobiernos socialistas se implementó, siendo radicalmente distinta a la respuesta de los recortes y la austeridad, han resultado efectivas.

Puede que este escenario no sea el que los populares esperaban, puede que se hayan frustrado las expectativas de los agoreros que predecían una caída del gobierno tras la crisis sanitaria y que el Partido Popular este tan perdido que no sea capaz de mostrarse solvente.

Sin proyecto político y sin consistencia, es evidente que la incoherencia del Partido Popular no va solo de macrogranjas.