Las 10 películas favoritas de... Juan Aguilera (Fabes)

Un amigo y colaborador de esta sección me animó a que presentara mis gustos cinematográficos en este medio nada más y nada menos que con mis 10 películas favoritas. Si hubieran sido como esas listas que pululan por ahí de las 50 o 100, o las 1001 pelis que hay que ver antes de morir, el trabajo me hubiera sido apetecible. Pero, ¿diez? Me resulta una labor estresante a la vez que injusta e incluso inaceptable. En resumen, un sacrilegio para alguien que se toma el cine como algo sagrado, como una religión. Y me pregunto y no me respondo, ¿qué filtro me autoimpongo?, ¿sonoro-mudo?, ¿blanco y negro-color?, ¿por género?, ¿por director?, tal vez ¿por actores preferidos?, ¿por países? Pues nada, me decido y hago un batiburrillo bien batido. ¿Qué saldrá? Bien, ahí va mi dichosa lista, no serán los mejores films, ni “vuestras” obras maestras, ni los filmes más representativos en géneros y épocas. Son mis pelis, mis elegidas, con las que en su momento disfruté al máximo o me dejaron una huella imborrable por los siglos de los siglos. Vamos allá.

1) Cinema Paradiso (Giuseppe Tornatore) (Nuovo Cinema Paradiso) (Italia, 1988)

Es cine dentro de cine. Un apasionante canto de amor al propio CINE. Una maravilla de la gran pantalla. Ennio Morricone con su música fundida en las imágenes nos conmueve a límites insospechados. Este film me hizo amar aún más si cabe al Séptimo Arte. La reviso cada cierto tiempo por su fuerza emotiva y nostálgica de algo pasado que ya no volverá. Y sí, lloro y mucho con su visionado. Qué le voy a hacer. Soy un flojo. “Hagas lo que hagas ámalo, como amabas la cabina del Paradiso cuando eras niño.”

2) Senderos de gloria (Stanley Kubrick) (Paths of Glory) (USA, 1957)

Película de culto antibelicista. Mismo actor y mismo director que en Espartaco. Pero esta obra menor me parece superior. Fue la última película en estrenarse de la lista negra de la censura española. Estuvo 30 años prohibida. Y estoy hablando del año 86. Me llamó la atención este dato y la visioné en Madrid mientras hacía el servicio militar. Describe unos hechos reales de la Primera Guerra Mundial donde para mayor gloria de unos generales mandan a una muerte segura a unos soldados a los que posteriormente tildan de cobardes. Su blanco y negro como suele ser habitual muestra más que muchos colores. En su momento me marcó. “Hay ocasiones en que me avergüenza ser un miembro de la raza humana. ¡Y hoy es una de ellas!

3) El planeta de los simios (Franklin J. Schaffner) (Planet of the apes) (USA, 1968)

Con uno de los finales más impactes presenciados, esta adaptación haría, en mi modesta opinión, elevar la ciencia ficción a categoría de gran género. Sus pésimas secuelas, series de televisión, recientes y mediocres remakes solo hicieron engrandecer aún más la primitiva y original, elevándola a obra maestra no solo de la ficción sino de la historia del cine. Si aún no conoces su final te envidio. Inolvidables sus “monos” personajes Cornelius y la doctora Zira. "¡Quítame tus sucias manos de encima, mono asqueroso! "

4) La lista de Schindler (Steven Spielberg) (Schindler's list) (USA, 1993)

Spielberg en estado puro con su gran obra. A partir de esta película ya nadie dudó de la maestría del director. Dejó de ser ese director “solamente” comercial. Realista, emotiva, conmovedora, impecable. Todo en el film está en su sitio. Preciosa fotografía en blanco y negro y una banda sonora preciosa de John Willians que encaja en cada secuencia. ¿Quién no ama al imperfecto Oskar Schindler y su contable y odia a muerte a Amon como capitán del campo de concentración? “Quien salva una vida, salva al mundo entero”

5) Rebeca (Alfred Hitchcock) (Rebecca) (USA, 1940)

Hitchcock es mi director fetiche. Maestro de maestros. Al menos 10 películas suyas podrían encabezar esta lista y no desmerecer ninguna. Fue los pocos directores que atraía al público a las salas solo con la presencia de su nombre en el cartel, por delante de guiones y actores. Elijo ésta por ser su primera película americana después de su periplo británico (23 films) donde da el espaldarazo definitivo a su carrera. Su arranque con la presentación de la mansión Manderlay como gran protagonista, la no presencia de Rebeca, la relación de rico con dama de compañía y esos personajes inolvidables, la odiosa señora Danvers como ama de llaves y ese gran secundario que es George Sanders forman en este film un cóctel con sabor a gran obra. “Anoche soñé que volvía a Manderley.”

6) Centauros del desierto (John Ford) (The searchers) (USA, 1959)

Uno de mis géneros favoritos. Y quien mejor que John Ford con su gran sabiduría narrativa para mostrarnos ese Oeste. Y qué mejor intérprete que John Wayne en uno de sus grandes trabajos dando vida al tío Ethan, personaje hosco, malhumorado, racista, incansable e inflexible en la búsqueda de su sobrina durante 10 años que son los que duran la apertura y cierre de una puerta coincidiendo con el comienzo y final del film. “Ya no son blancos, ahora son comanches”

7) Érase una vez en América (Sergio Leone) (Once upon a time in America) (USA, 1984)

Muchos, la mayoría dirán que el Padrino es mejor. No es mi caso. Es la obra maestra de Sergio Leone. La que él quiso rodar, la que le costó años y años de intentos. Es una impecable película, pegadiza música (otra vez Morricone), preciosa fotografía, excelente dirección, gran reparto (tremendo el gran De Niro) y minuciosa ambientación. Esa era una de las características más personales del maestro. Concienzudo y perfeccionista. En esta película, su película, hay escenas que nos hacen ver lo grande que puede ser el cine. “- ¿Qué has hecho los últimos treinta años? - Levantarme temprano.”

8) Los santos inocentes (Mario Camus) (Los santos inocentes) (España 1984)

Cine patrio no podía faltar. Esta dura y conmovedora película con una adaptación sin igual de la que Delibes no tendrá queja y unas interpretaciones fantásticas de Alfredo Landa, Paco Rabal, Juan Diego, Agustín González merece estar en el top de esta selecta lista. Ambientada en esa España rural y franquista de señoritos caciques y siervos sin futuro. Una historia desgarradora. Sin duda la mejor película de nuestro cine. "Milana bonita"

9) El maquinista de la General (Buster Keaton y Clyde Bruckman) (The General) (USA, 1926)

Bien podía haber elegido a Charles Chaplin y su Quimera del Oro. Y sería justo. Pero me decido por Keaton a la sombra siempre del anterior e infravalorado. Desde niño fue mi predilecto de aquel cine cómico y mudo. Con el tiempo odié que en España se le conociera como Pamplinas o Cara de Palo. Esta es su gran obra, trepidante, bien montada con todas las escenas al milímetro, un ritmo de gags y secuencias de acción maravillosas con lo que eso conllevaba hablando de la época a la que nos referimos. Se ríe sin hacerlo de lo absurdo de la guerra. Para la elección de esta obra suya, admito la licencia que me tomé por el subjetivo corporativismo debido a la profesión del personaje y la importancia del ferrocarril en el guion.

10) Mystic river (Clint Eastwood) (Mystic river) (USA, 2003)

Clint es el mejor director de cine vivo en estos momentos. Por lo menos es mi favorito. Y por dos cabezas de ventaja. Al igual que dije de Hitchcock, Eastwood podría encabezar con algunos de sus filmes esta lista y nadie se sorprendería. He escogido esta porque me parece la más completa, pero estaría bien representada con Gran Torino, Millon dollar baby, Sin perdón, o Los puentes de Madison. Esta historia que nos ocupa entre estos tres amigos de la infancia es desgarradora. Por momentos te deja mal cuerpo y te exaspera. Muy convincentes las interpretaciones de Tim Robbins y Sean Penn. Añadir la absorbente y pausada música que acompaña durante la cinta con esas hermosas notas de piano que el propio Eastwood compuso. “Enterramos nuestros pecados, lavamos nuestras conciencias”.

©2025 Ciudad Real Digital | www.ciudadrealdigital.es