Este sábado 7 de septiembre a las 15:30 h. en CMT.

Cine épico, de sandalias, falditas antiguas, batallas grandilocuentes, músculos, gente guapa, ritmo frenético… todo eso y mucho más supone esta adaptación cinematográfica de la homérica Ilíada.  

Cine dirigido con vigor y sentido del espectáculo por el alemán americanizado Wolfgang Petersen, el responsable de aquella gran película claustrofóbica sobre naves sumergibles titulada EL SUBMARINO, de la trepidante ESTALLIDO o de uno de los mejores trabajos de Clint Eastwood en su faceta estrictamente actoral, como es EN LA LÍNEA DE FUEGO. Tiene varias más estimables, prácticamente todas denotan un profesional esforzado y muy eficiente, un tipo que es un valor seguro a la hora de resolver con limpieza narrativa los encargos de la industria.  

Cine que recrea con elogiable precisión la entrada del famoso caballo o que reproduce con gran sentido de lo rítmico y hasta del ballet, intensas  peleas a espada, como la protagonizada por Pitt.  

Cine desdeñado muchas veces por tantos de mis colegas pero que proporciona infinito disfrute. Como el antiguo y grande del viejo Hollywood. Muy taquillero y con un gran despliegue de vestuario, justamente nominado al Oscar.  

En TROYA, además, destaca poderosamente su reparto compuesto por muchos bellezones del Hollywood actual, la también de origen alemán Diane Kruger o la altísima Safron Burrows, o los apolíneos Brad Pitt como un muy convincente Aquiles, un semidiós humano, Orlando Bloom y Eric Bana. Reforzados por un grupo de veteranos de primera línea: Peter O´Toole, Brendan Gleeson o esa preciosa mujer a cualquier edad, inolvidable Lara, que responde al nombre artístico de Julie Christie.  

No da tregua, se sigue con la máxima atención desde el minuto uno al último, contribuyendo a una resurrección del cine épico y de “romanos” que tantos buenos recuerdos nos traen a los cinéfilos de cualquier tiempo y lugar.  

Dura dos horas y media, sí, un metraje respetable, pero pasan como un suspiro.