Este jueves 13 de junio a las 22:00 h. en La Sexta 3. Sorprendente y espléndido debut del cineasta brasileño José Padilha, con el que obtendría un justificado Oso de Oro en el Festival de Berlín.  

Esgrimiendo una manifiesta vocación documentalista y un endiablado ritmo, Padilha nos sumerge en el mundo de la cotidiana y salvaje violencia en Río de Janeiro y, en concreto, en el muy reconocible, demoledor y terrible paisaje delincuencial de las favelas, por el que se desenvuelven policías corruptos y brutales y traficantes sin el menor de los escrúpulos. Un mosaico que resulta todavía más impresionante por la explicitud con que nos es mostrada una barbarie expeditiva y sin contemplaciones.  

Sus imágenes no desprenden moralismos de ningún tipo, hay realidad pura y dura captada por un punto de vista, por una cámara trepidante y compulsiva.  

Basada en el libro de André Batista, TROPA DE ÉLITE puede incluirse dentro de una corriente de carácter social, cuyo primer banderín de enganche sería la estremecedora y magnífica CIUDAD DE DIOS de Walter Salles.  Estos dos títulos y una inteligente y acertada política fiscal respecto al Séptimo Arte han influido decisivamente para un rugiente despertar, o renacer, del cine carioca. Curiosamente ambos trabajos comparten idéntico guionista, el brillante Braulio Mantovani.  

De todas formas han sido varios los que la han achacado resultar un tanto ambigua en cuanto a su discurso, al considerar que se acaba refocilando en esa violencia que quiere denunciar, algo que no comparto, pues pese a entendibles efectismos, prevalece un sentido de lo cinematográfico verdaderamente eléctrico, virtuoso y elogiable.  

Y en cualquier caso funciona también a las mil maravillas como incitadora a la reflexión, al mostrarnos a unas clases privilegiadas que utilizan ese depravado estado de las cosas para sus propios fines, por ejemplo para el tráfico de drogas.  

Al igual que la que rezuma toda la película, es de justicia destacar la enérgica interpretación de Wagner Moura como Nascimento, el capitán al mando del BOPE, el Batallón de Operaciones Policiales Especiales, que actuó con la máxima contundencia ante la visita a la megalópolis en 1997 del Papa Juan Pablo II.