Comedia de enredos sentimentales completamente irrelevante y del todo prescindible, confeccionada para el mayor “lucimiento” de un Santi Millán demasiado dosificado y para mostrar relajantes paisajes de apartahotel del Caribe.

Roberto Santiago construye –es un decir- un juguetito cómico de escasos vuelos y chistes simploncillos en el que salvo un intermitente Millán y la argentina Martina Gusman, el resto del reparto más bien se pasean o ponen posturitas más que interpretar.

Me pregunto en tantas ocasiones si el cine español se puede permitir la frecuencia de tantas producciones –en este caso aliándose con Argentina- que no superan unos mínimos niveles de exigencia. El único consuelo posible es el de poder servir para ofrecer trabajo a los profesionales que participan, aunque mucho me temo que es pan para hoy y hambre para mañana. Aparte que no creo que nuestra industria se pueda permitir tanto celuloide desechable.

Contemplando las idas y venidas de estos personajes tan desorientados y tan de hoy en día, en los que unos tienen líos con los otros y casi todos con todos, recuerdo con verdadera añoranza a cineastas que han reflejado perfecta y agudamente los desarreglos de parejas y a los que he venerado siempre. Como Blake Edwards y títulos suyos clásicos como LA PANTERA ROSA o VÍCTOR O VICTORIA, o más relativamente “modernos” como 10. LA MUJER PERFECTA, MICKI Y MAUDE o UNA CANA AL AIRE. Y soy consciente de que las comparaciones resultan odiosas pero… también inevitables.

Es de lo poco bueno que generan este tipo de productos raquíticos, que uno ejercita la memoria, algo bueno para volver a refrescar o revisar algunas de esas grandes obras, en esta ocasión de la comedia, que me han hecho feliz tantas veces. Lamentablemente, no es el caso que aquí tengo entre manos. Y eso que tengo que volver a constatar que el cine de nuestras latitudes me obsequió en 2013 con dos exponentes bastante decentes y respetables, ¿QUIÉN MATÓ A BAMBI? Y 3 BODAS DE MÁS.

Una pérdida de tiempo que no merece mayor extensión de comentario.