Después de los “atracones” de torrijas y a un paso de las vacaciones de verano  muchas se están planteando ya la operación bikini. El cambio de vestuario propio de estas temperaturas es el detonante para poner solución a esos kilitos de más que hemos cogido durante el invierno pero, ¿es necesario pasarse horas machacándose en el gimnasio y sustituir las pizzas, el queso o el chocolate por brócoli, acelgas o lechuga para conseguir ese cuerpo que nos han impuesto los medios de comunicación, las marcas y los diseñadores?

Desde hace años el prototipo de mujer 10 ha sido aquella de 1,80 de altura y unas medidas que no sobrepasan el 90-60-90, solo hay que ver el interés que despierta el desfile de lencería de Victoria´s Secret con modelos de caras angelicales y medidas imposibles. Un ideal de mujer que se aleja bastante de los estándares de la mujer actual.

Por eso de un tiempo a esta parte hemos comenzado a ver distintas iniciativas donde pretenden acabar con este modelo de mujer escuálida y sin curvas y sustituirlo por otro mucho más cercano a la mujer de hoy en día.

Ya son muchas las marcas de ropa que han visto un nuevo nicho de mercado el cual estaba muy poco explotado y han caído en la cuenta de que ¡existen mujeres con una talla por encima de la 38! y que quieren vestir con ropa atractiva y moderna, incluso las grandes marcas han apostado por ampliar su tallaje hasta una 48, como es el caso de Adolfo Domínguez que fue pionero en sumarse a esta tendencia con la línea AD+ o Mango con Violeta by Mango, líneas que han sido muy aceptadas por las consumidoras.

Lo cierto es que la moda curvy es uno de los segmentos que más está creciendo en la industria, e imagino que esto no es algo casual sino la verificación de que las modelos actuales no representan a la mayoría de sus compradoras y que poco se asemejan a las modelos que vemos en los desfiles ¡por fin las mujeres reales tienen un hueco en el mundo de la moda!

Marcas de lencería como Lane Bryant han querido dar un vuelco y apostar por curvilíneas figuras y demostrar que la belleza también se encuentra en las curvas, y han realizado una campaña con el nombre “Im no Angel” en el que modelos de tallas grandes protagonizan bellísimas instantáneas en ropa interior además han animado a todas la mujeres a compartir en la redes sociales fotográficas mostrando sus curvas a través del hashtag #ImNoAngel iniciativa en la que no han dudado en sumarse infinidad de mujeres de todo el mundo.

La vida está llena de experiencias increíbles y no podemos estar obsesionadas por la talla, porque no somos ángeles y estamos orgullosas de que así sea. La revolución de la mujer real ha empezado ya.

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¡Feliz día!