jueves, 5 de junio

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Estreno en Royal City

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Pancho, el perro millonario ()

Director: Tom Fernández

Intérpretes: Ivan Massagué, Patricia Conde, María Castro, Secun de la Rosa, Alex O'Dogherty, Armando del Río, David Fernández, Marta Hazas, César Sarachu, Eloy Azorín

Sinopsis: Pancho vive gozando de la buena vida y de los caprichos más extravagantes desde que un billete de lotería cambió su vida para siempre. Su secretario personal, Alberto (Iván Massagué), le administra su inmensa fortuna e intenta que se convierta en un perro rico responsable y que abandone su vida de derroches y caprichos…aunque sin demasiado éxito.

Crítica de José Luis Vázquez

Valoración: 1 estrellas

Suelo contenerme con los epítetos o calificativos desagradables, pues nunca considero que sea yo  quién para echar por tierra el trabajo de esforzados profesionales, pero lo de este PANCHO, EL PERRO MILLONARIO me parece indignante, de juzgado de guardia, inaguantable, una tomadura de pelo que consigue que las películas de Parchís parezca que hayan sido dirigida por el mismísimo Steven Spielberg.

El sonrojante ¿argumento?, al guión mejor no me refiero, que no alcanza siquiera a niños acostumbrados a cualquier desaguisado, es de los más delirantemente infumables contemplado en años. Sus diálogos deberían haber tomado nota de Los mundos de Yupi o de Barrio Sésamo, por supuesto con perdón para estos dos referentes, ni tan siquiera alcanza en consistencia a los de Los Lunnis.

Parece ser que ha sido extraído de un anuncio de esos de televisión de los que últimamente no frecuento. Eso hubiera sido lo de menos, si a cambio desplegara una mínima pizca de ingenio, gracia, solvencia o creatividad. Pero el –a todos los niveles- infantilismo más devastador se acaba adueñando de esta indigesta y supuesta producción familiar.

Y por supuesto, una de dos, o Patricia Conde se preocupa –y no es manía personal, empeño mi palabra- de dar alguna clasecilla de arte dramático, o por favor que algún familiar o amigo cercano le indique que cambie de rumbo. De lo peorcito visto este año en lo  que a “interpretaciones” se refiere.

No dudo en otorgarle el galardón de mayor bodrio del año… hasta la fecha.

 

José Luis Vázquez