viernes, 29 de marzo

Ciudad Real

Visita nuestra página en Facebook Síguenos en Twitter Síguenos en Instagram Síguenos en YouTube
Buscar
Logotipo de Ciudad Real Digital

Estreno en Royal City

Compartir en Facebook Compartir en Twitter Imprimir crítica

Dallas Buyers Club ()

Director: Jean-Marc Vallée

Intérpretes: Matthew McConaughey, Jennifer Garner, Jared Leto, Steve Zahn, Dallas Roberts, Denis O'Hare, Griffin Dunne, Kevin Rankin, Lawrence Turner, Jonathan Vane

Sinopsis: Basada en la vida real de Ron Woodroof, un cowboy de rodeo texano, drogadicto y mujeriego, al que en 1986 le diagnosticaron SIDA y le pronosticaron un mes de vida. Empezó entonces a tomar AZT, el único medicamento disponible en aquella época para luchar contra tan terrible enfermedad.

Crítica de José Luis Vázquez

Valoración: 5 estrellas

Si van a ver DALLAS BUYERS CLUB, algo que, recomiendo encarecidamente, entenderán perfectamente el por qué sus dos intérpretes masculinos han sido recompensados con sendos Oscar.  Y en concreto, la razón por la que Matthew McConaghey se lo ha acabado arrebatando finalmente a otro fuera de serie, Leonardo Di Caprio.

Era fácil hacer dibujos facilones de los dos personajes marginales sobre los que bascula la acción de principio a fin. Pero ni muchísimo menos caen en la trampa. Nos regalan dos retratos ejemplares en su sobriedad y falta de innecesarios alardes. Conmovedores eso sí, pero sin apelar en momento alguno a numeritos histriónicos.

Supongo que el director Jean-Marc Vallée ha tenido con ellos un entendimiento perfecto. Inteligentemente deja en sus rostros y en su deambular el peso de toda la trama. Y me parece todo un acierto.

McConaghey deja una silueta y una actuación para la posteridad. Tras ese sombrero vaquero y bigotazo, se esconde un individuo machistoide, Ron Woodrof, cocainómano, alcohólico, homófobo al que, tras serle diagnosticado SIDA en los albores de la enfermedad, ese aspecto inamoviblemente cadavérico en lo físico y en lo personal se va nutriendo de humanidad, de verdadera vida y de comprensión por el sufrimiento de los demás. Leto es Rayon, un transexual tierno, cálido, muy veraz.

Mediante un estilo cercano y ágil, Vallée, un tipo que previamente me había regalado dos joyas como CRAZY y CAFÉ DE FLORE, evita las trampas del melodrama y la lágrima fácil, de la moralina, del sermón y lleva a cabo un relato directo de los comienzos de esa pavorosa peste que avanzó devastadora al comienzo de la década de los 80, cebándose especialmente entre homosexuales y drogadictos, presas fáciles para que fanáticos de todo calibre achacaran a una maldición divina tan terrible enfermedad.

Una vez más, el cine norteamericano nos cuenta la historia de David y Goliat. De ese vaquero electricista en lucha contra médicos, farmacéuticas y autoridades sanitarias para mejorar la calidad de vida y la duración de la misma de los pacientes, como él, afectados por el maldito VIH, para los que conseguiría medicamentos prohibidos en su país, pero de probada eficacia. De la cruzada emprendida por rebajar la dosis del fármaco AZT que en un primer momento debido a su toxicidad acentuaba los efectos nocivos sobre los enfermos.

Estamos ante un nuevo capítulo de la típica historia norteamericana de superación, coraje y tenacidad. Y de algo que en principio no era nada fácil, tocar un asunto inicialmente tan triste y espinoso aportando luz y esperanza. Alternando para ello diálogos ácidos con alguna que otra humorada.

Dejando de paso algunas secuencias, como la mirada entre Leto y McConaghey y el posterior abrazo, reconociéndose ambos en su dolor, como una admirable demostración de momento nada altisonante ni sensiblero, pero de una emoción especial.

Son varios los que le han colgado el sambenito de telefilme de sobremesa. Nada más lejos de la realidad, ni por realización ni por alcance. Aunque tampoco sería un desdoro, pues varios de esos productos para televisión a veces tienen una calidad de lo más respetable… hasta poseen cierto espíritu independiente, por ser confeccionados con pocos medios y en poco tiempo. Pero insisto, nada que ver.

Una formidable película, un peliculón, como 12 AÑOS DE ESCLAVITUD, NEBRASKA, HER, PHILOMENA, CAPITÁN PHILLIPS, EL LOBO DE WALL STREET, EL GRAN GATSBY, FROZEN, BLUE JASMINE, THE GRANDMASTER y LA GRAN ESTAFA AMERICANA, vamos toda la impresionante terna de producciones nominadas al Oscar en la edición referida a 2013.

Sencillamente impresionante, espectacular. Mi americanitis aguda aumenta de considerable volumen año a año y título a título. 

José Luis Vázquez