Director: Drew Goddard
Intérpretes: Kristen Connolly, Chris Hemsworth, Fran Kranz, Richard Jenkins, Bradley Whitford, Anna Hutchison, Jesse Williams, Amy Acker, Brian White, Tim De Zarn, Tom Lenk, Jodelle Ferland, Sigourney Weaver
Sinopsis: Cinco adolescentes se preparan para pasar el fin de semana en una cabaña, situada en un remoto bosque y sin medios de comunicación con el exterior. En el sótano encuentran una extraña colección de recuerdos; entre ellos, un diario que habla de la antigua familia que ocupó la casa. Lo que no sospechan es que están siendo observados y que su vida corre peligro.
Pese a los dos años de retraso con los que ha sido estrenada en España, LA CABAÑA DEL BOSQUE (THE CABIN IN THE WOODS) se presentaba con la vitola de renovadora y “deconstructora” producción de terror, subgénero… el que indica su título.
Y vale que la primera hora genera expectación, o que resulta relativamente sorpresiva, interesante y mantiene la atención en todo momento, pero su inconveniente es que en el tramo final se lanza cuesta abajo y sin frenos. Recurre a un acumulativo y desaforado empacho monstruoso/visual, con plano final delirante del que todavía estoy recuperándome. Algo por otra parte típico y habitual en el cine reciente del género o de efectos especiales. Películas de cierta consistencia como ésta acaban fastidiándose por ese tono excesivo y grotesco.
Se dice que es un homenaje al cine de terror, pero hubiera sido deseable que de ser así, apelara a una mayor sutileza o a ese ingenio “bigbrotheriano” que sugería y mostraba su inicio y parte de su desarrollo.
Con todo, es un aceptable pasatiempo que, probablemente, no defraudará a los muy obsesos del género, aunque a mí eso tan solo no me vale para mi disfrute total, que una aparente e imaginativa buena idea sustente todo un entramado.
A título anecdótico, destacar que de su producción se hizo caro Joss Whedon, una de las más estimulantes irrupciones surgidas en asuntos fantasiosos en los últimos diez años, gracias a títulos –en su faceta como director- como SERENITY o LOS VENGADORES.
Entre lo destacable, ese cierto tono de subvertir elementos tópicos y tradicionales que no deja de ser loable, así como un reparto juvenil cómplice con ese espíritu un tanto gamberro. A ratos, humoradas y espanto, confluyen en buena armonía. Tal vez, eso sí, una sátira no siempre atinada coma un tanto terreno al terror puro.
Finalmente, resulta una atractiva y vistosa noria de parque de atracciones temático sin demasiado recorrido.
José Luis Vázquez