Director: Jeanne Herry
Intérpretes: Sandrine Kiberlain, Gilles Lellouche, Elodie Bouchez, Olivia Côte, Clotilde Mollet, Jean-François Stévenin, Bruno Podalydès, Miou-Miou
Sinopsis: Theo acaba de nacer. Después de dar a luz, su madre biológica le entrega a un programa de adopción. Los servicios de adopción deben encontrar entonces a la que se convertirá en su madre adoptiva. En el otro extremo, Alice (Élodie Bouchez), de 41 años, lleva casi diez años luchando por ser madre. Un grupo de profesionales trabajará para que Theo y Alice puedan reunirse. (FILMAFFINITY)
Finalizada su proyección entiendo la buena acogida dispensada en su país de origen, Francia, al igual que esas 7 nominaciones a los César con que fue reconocida, entre las que figuraba la de mejor película.
Estamos ante un cine de trazo delicado, tierno, fino, muy bien trenzado, pese a que en los compases iniciales alguien se pueda despistar un poquito con la presentación de personajes. Pero luego todo acaba casando y van aflorando las personalidades de sus protagonistas.
Alguno ha llegado a afirmar que es la obra definitiva en materia de adopción. Yo no me atrevería a afirmarlo tan contundentemente, pues entre sus competidoras figura una notable y reciente producción española titulada precisamente así, LA ADOPCIÓN de Daniela Féjerman (basada en experiencias personales de su directora), pero sí estoy dispuesto a reconocer que podría figurar en el pelotón de cabeza, tan solo un punto por detrás de otros referentes como CASA DE BABYS, ADOPTION y SECRETOS Y MENTIRAS (como pueden comprobar… de estilos y registros diferentes).
Aquí es otra mujer, la igualmente actriz y cineasta de 41 años Jeanne Herry, la que en su segundo largometraje (tras la interesante ELLE L´ADORE, recompensada como la mejor opera prima en los Cesar de 2014) la que coge el testigo de otras antecesoras, para ofrecer un trabajo preñado de tacto y sensibilidad, en particular todo su tramo final y el desenlace.
Vuelve a contar con actrices con las que había colaborado previamente, como Sandrine Kiberlain (trabajadora social, la más rubia) en su anteriormente mencionado debut o la veterana Miou Miou en el cortometraje de 2009 MARCHER). Acompañados de profesionales de tan probada y contrastada, como Gilles Lelouche (asistente familiar), Elodiez Bouchez (una audio-descriptora para ciegos, candidata a conseguir al niño) u Olivia Côte (también trabajadora social).
No deja de resultar curioso que haya contado con la colaboración de nombres de tirón del país vecino, pues esta propuesta adopta un punto de vista rayano en el documental. Aclaro, sin dejar de ser en ningún momento una ficción en toda regla. Podrán contrastarlo ustedes mismos. Y, por supuesto, entiéndase de manera elogiosa.
Una vez más, un guion –de la propia autora- bien perfilado y finalmente ajustado, es parte importante en lo bastante y bueno logrado.
No la dejen pasar. Eso sí, en las antípodas de la magnífica, extraordinaria y arrasadora VENGADORES: ENDGAME. Para mí en absoluto resulta incompatible disfrutar de ambas, aunque la de los súper héroes me toque especialmente las fibras emocionales. La aquí comentada también me llega y, por otra parte, sus personajes no dejan de ser igualmente héroes, en este caso cotidianos y reales, incluyendo un bebé cautivador.
José Luis Vázquez