Cultura en Tiempos de Crisis

Exorcismo en Georgia (2013)

Director: David Coggeshall

Intérpretes: Abigail Spencer, Chad Michael Murray, Morgana Shaw, Emily Alyn Lind, Katee Sackhoff, Monica Acosta, Grant James, Lauren Pennington, Sam Polin

Sinopsis: Poco después de instalarse en su nueva casa de Georgia, una pareja descubre que su hija mantiene misteriosos encuentros con personas que sólo ella parece ver. La situación se complica cuando también los padres son testigos de extraños fenómenos alrededor de la casa, que sugieren un escalofriante misterio que se ha mantenido en secreto durante generaciones.

Crítica de José Luis Vázquez

No hacía falta pero contemplando este considerable tostonazo, más extraordinaria resulta aún EXPEDIENTE WARREN, película de la que tengo la impresión se estudiará como referente del género de terror para analizar esta época.  

EXORCISMO EN GEORGIA es un burdo subrayado de arquetipos y topicazos mil, que trata de jugar la baza de una renovadora y fallida plástica para mostrar los espíritus que pululan por sus imágenes, y que no acaba sino consiguiendo, manifestar más amplificadamente las torpezas de todo tipo que exhibe, las narrativas en primer lugar.  

Para volver a recurrir a la esclavitud como expiación de pecados actuales o posteriores, hacía falta mucho talento y un director con imaginación o fuste. Pero, desgraciadamente, no confluyen aquí estos factores.  

Y pese a intentar seguir la estela de EXORCISMO EN CONNECTICUT o similares, carece de la solvencia profesional de aquella. Todo se reduce a clichés expuestos con estética feísta, confusa y con poca chicha.  

Surgido de un documental de Discovery Channel, pueden comprobar cómo tiene que recurrir a recursos manidos y pésimamente desarrollados. Lo que en EXPEDIENTE WARREN era reciclado convenientemente, elaborando con gusto y talento las secuencias de tensión, creando una atmósfera de permanente amenaza, en este infausto EXORCISMO son fotos que se rompen, sombras amenazadoras, rostros grotescos y otras parafernalias propias del género las bazas expuestas sin gracia alguna.  

Por no hablar del posturitas protagonista masculino, Chad Michael Murray, que más parece que está paseándose por una sesión de pasarela Cibeles que por una genuina película de terror.  

Para más inri, se han lucido los que la han rebautizado al español, pues en Georgia sí transcurre, pero de exorcismos nada de nada por ninguna parte. Podrían haber respetado el más atinado título original, FANTASMAS DE GEORGIA.

José Luis Vázquez