Director: Fernando León de Aranoa
Intérpretes: Javier Bardem, Penélope Cruz, Peter Sarsgaard, Julieth Restrepo, David Ojalvo, David Valencia
Sinopsis: Drama sobre el narcotraficante colombiano Pablo Escobar, basado en el libro 'Amando a Pablo, odiando a Escobar' escrito por la periodista colombiana Virginia Vallejo donde cuenta la relación amorosa que mantuvo con el narcotraficante en la década de los 80. (FILMAFFINITY)
Vive horas bajas el brillante guionista y cineasta Fernando León de Aranoa, las más bajas de una carrera que comenzaría fulgurante hace poco más de dos décadas (en 1996). Encadenaría inicialmente dos notables trabajos y otro más excepcional, los dos primeros fueron FAMILIA y BARRIO, el tercero LOS LUNES AL SOL. Pero tanto el tan solo correcto AMADOR, como el anterior al que aquí me ocupa, el fallido UN DÍA PERFECTO, como éste, se encuentran a gran distancia artística de aquellos.
No hay tampoco que preocuparse en exceso todavía, fíjense la racha calamitosa que llevaba Isabel Coixet en los últimos tiempos (MI OTRO YO, AYER NO TERMINA NUNCA, ELEGY, MAPA DE LOS SONIDOS DE TOKIO… y qué manera ha tenido de remontar con la preciosa y estupenda LA LIBRERÍA.
Como crónica sangrienta, espeluznante, es pasable, aunque trate de remitir en ocasiones al estilo del cine gangsteril creado por Martin Scorsese (MALAS CALLES, UNO DE LOS NUESTROS, CASINO, INFILTRADOS), pero como puesta en escena e interpretativamente, me defrauda considerablemente.
Penélope Cruz luce tan fotogénica –salvo en los compases iniciales, supongo que para ser fiel al horripilante peinado de la época- como siempre, pero no me la creo ni un solo instante, me resulta afectada como en tantas ocasiones (si hay algún Óscar en la historia que me resulta incomprensible es el que le otorgaran a la mejor actriz de reparto por VICKY, CRISTINA, BARCELONA). Javier Bardem roza en algunos momentos la parodia, está desaforado Y no me vale la excusa de que el personaje así lo requiere, también el Tony Montana de Al Pacino en EL PRECIO DEL PODER o el De Niro de la citada UNO DE LOS NUESTROS y en cambio me dieron el pego.
León de Aranoa ejecuta una dirección plana, reumática, correctita como mucho o en el mejor de los casos (no cabría pedirle menos a alguien de su valía), deudora de tantos antecedentes mucho más ilustres, pero falta de verdadero nervio dramático, si por tal no entendemos las diversas escabechinas ofrecidas. Insuficiente, esquemática en cuanto a mostrar la encarnadura de los personajes, y ya no me refiero a la imposibilidad de poder empatizar con ellos, sino a que al menos no parezcan de comic o fotonovela barata.
Por otra parte, el asunto, el personaje (un muestrario significativo de las correrías y brutalidades del tristemente célebre narcotraficante colombiano Pablo Escobar, pues la historieta con su amante, Virginia Vallejo, en cuya autobiografía se han inspirado, acaba diluyéndose), ha sido demasiado sobado en los últimos tiempos, y nada aporta nada de relieve. No hay más que haber visto algún capítulo de NARCOS para que en la comparación, injusta si quieren, pero inevitable, acabe por palidecer del todo.
Lo que no podría decir es que sea del todo aburrida, aspecto que no es para despreciar, aunque no solamente basta con eso, aunque siempre será mejor que serlo. Es más, algunas otras películas puede que más tediosas a veces tienen o tiran de un aquél, de un algo, que las puede acabar redimiendo. Desafortunadamente, no es el caso.
Es un tanto larga, como ha apuntado algún colega estridente (sin gracia, añadiría por mi cuenta), ampulosa y la voz en off en vez de ser explícativa acaba resultando reiterativa sobre lo avistado en pantalla.
Su mayor defecto es que se revela tan protésica como la descarada papada y el falso y llamativo barrigón que pasea Bardem.
José Luis Vázquez