jueves, 17 de julio

Ciudad Real

Visita nuestra página en Facebook Síguenos en Twitter Síguenos en Instagram Síguenos en YouTube
Buscar
Logotipo de Ciudad Real Digital

Estreno en Royal City

Compartir en Facebook Compartir en Twitter Imprimir crítica

Loving Vincent ()

Director: Dorota Kobiela y Hugh Welchman

Intérpretes: Animación. Voces: Douglas Booth, Helen McCrory, Saoirse Ronan, Aidan Turner, Eleanor Tomlinson, Chris O'Dowd, Jerome Flynn, John Sessions, Holly Earl, Robert Gulaczyk, James Greene, Bill Thomas, Martin Herdman, Josh Burdett, Richard Banks, Shaun Newnham

Sinopsis: Primer largometraje compuesto por pinturas animadas, "Loving Vincent" es un film homenaje a Van Gogh en el que cada fotograma es un cuadro pintado sobre óleo, tal y como el propio Vincent lo hubiera pintado. Sus 80 minutos de duración están compuestos por 56.800 fotogramas que han sido pintados, uno a uno, por una gran cantidad de excelentes pintores a lo largo de varios años, todos inspirándose en el estilo y arte magistral de Van Gogh. (FILMAFFINITY)

Crítica de José Luis Vázquez

Valoración: 5 estrellas

Este experimento único, inclasificable, obra el milagro de conseguir que la pintura cobre movimiento, vida.

Han sido casi diez años los empleados para la gestación definitiva de este singular proyecto, el mismo tiempo en el que el pintor Vincent Van Gogh, objeto de homenaje completo (por aludir a su figura y por la recreación que se hace de su inigualable técnica), emplearía para crear sus casi 900 cuadros.

LOVING VINCENT, realizada precisamente a partir del estilo del genio holandés, ha sido pintada a mano fotograma a fotograma… en óleo. Es la primera producción de la historia en haber sido así concebida. Pero eso en sí mismo de nada valdría si no se percibiera en sus trazos, en sus texturas, en sus pliegues animados verdadero talento, como es el caso.

Por otra parte, esa forma tan deslumbrante es posible que opaque un tanto en el fondo. Un fondo que parte estructuralmente de los códigos empleados en la mítica CIUDADANO KANE, es decir, esa paulatina indagación en quién es y en lo que hay verdaderamente tras el artista. Permitiéndose inclusive cuestionar su suicidio.

Y es aquí donde la película cojea ligeramente, no tanto porque no ofrezca frases, personajes o momentos interesantes, sino porque resulta algo endeble en su trama policíaca. Aun así, como es fácil contemplarla cautivado, fascinado de principio a fin, casi no se repara demasiado en ello hasta finalizada su proyección.

Lo que se acaba imponiendo es la meticulosidad profesional, esa con la que 125 dibujantes se han puesto manos a la obra. Lo obtenido son casi 60.000 fotogramas que exudan belleza, el espíritu del genio por todas sus costuras.

Una buena prueba de que del maridaje de dos manifestaciones artísticas diferentes puede surgir algo deslumbrante, hermoso.

 

José Luis Vázquez